¿En qué consiste?

Se trata de una emisión de ultrasonidos de alta intensidad, capaz de concentrar su energía, en las estructuras de profundidad con un aumento de temperatura que puede alcanzar entre 65º-75ºC, provocando retracción inmediata y re-estructuración del colágeno y elastina sin dañar de la epidermis.

Es una alternativa a procedimientos quirúrgicos, al ser no invasivo, con resultados inmediatos y a largo plazo en procesos de rejuvenecimiento y tensado cutáneo.

Está indicado para pacientes con flacidez de piel leve o moderada, a partir de los 30 años. Individuos con las cejas caídas, flacidez en las mejillas, región mandibular y cuello. Tambien se puede usar con fines de remodelación corporal, para aquellas personas que tengan acumulación de grasa.

Se puede utilizar en cualquier momento del año y se puede complementar con otras técnicas, rellenos, toxina botulínica, láser, etc.